Después de las experiencias vividas en los foros de viajes a lo largo de unos cuantos años, al menos un par de cuestiones si que he sacado en limpio. Por un lado, que mucho tendrían que cambiar las cosas y también yo misma para que me planteara la opción de poner en marcha un foro, fuera de forma individual o como miembro de un grupo.
Por otra parte, sin embargo, si creo que al menos ese dilatado periplo me ha servido para adquirir los suficientes conocimientos para poner en marcha ese supuesto ágora de viajes, con unas mínimas garantías de convertirse, al menos, en una herramienta útil y estable para parte de la comunidad viajera que quisiera pasarse por él.
Por si alguien con más tiempo y menos desengañado que yo se quiere poner manos a la obra, dejo por aquí diez recomendaciones (en esta parte van las tres prrimeras) a tener en cuenta para quien quiera meterse en la trabajosa aventura de poner en marcha y gestionar un foro de viajes.
1.- La mayoría de los foros (ocurre también mucho con las páginas personales y blogs) arrancan de un enfoque claramente erróneo. Dan una prioridad inicial absoluta a la estructura, la parte estética o los previsibles contenidos del producto a montar y dejan en un lugar muy secundario la difusión del mismo. Esto es como empezar la casa por el tejado. De muy poco nos sirve crear una página muy atractiva, si posteriormente no la va a conocer casi nadie.
Diría que si no se tiene una estrategia de difusión clara y con posibilidades de éxito, sería incluso mejor dejarse de plantear la creación de ese espacio y dedicar ese valioso tiempo a otra cosa, que a la larga va a generar menos frustración. En la red hay decenas de foros de viajes con administradores muy voluntariosos, que apenas –si llega- reciben cinco o diez mensajes al día. Y ello ocurre porque no han sabido o podido darse a conocer. La sensación que da al navegar por ellos es de pena y dejadez.
2.- La inmensa mayoría de los administradores que conozco de foros de viajes, no gestionados por empresas, obran de forma egocéntrica, mezquina, manipuladora, injusta a conciencia o muy poco respetuosa con sus usuarios (sé que los adjetivos son duros, pero no creo que aquí deba andarme con medias tintas). Esto a la larga hace que esos lugares, en vez de espacios abiertos y masivos de opinión, se acaben convirtiendo en pequeños reductos privados formados por las camarillas de turno que rodean al gestor.
No tengo nada contra estos foros –salvo que perdí mi valioso tiempo en un par de ellos antes de darme cuenta.-, dado que cada uno construye y usa lo que le viene en gana. Pero si lo que se pretende es hacer un foro plural, abierto, fresco y participativo, hay que diseñar una estrategia muy orientada en la empatía, la equidad, la generosidad y el equilibrio. Es posible que como para ser jefe, para administrar un foro sirva cualquiera, pero en ambos casos se hace necesario manejar o adquirir una serie de habilidades.
3.- Ni en la vida, ni tampoco en los foros (que son un muy buen reflejo de esta) se puede ser a la vez juez y parte. Quiero con esto decir que no es conveniente que uno sea administrador o moderador y a la vez usuario participante del mismo. ¿Cómo se soluciona este aparentemente complejo aspecto, que para algunos podría parecer un problema?. Creo que hay una forma bastante sencilla: Los administradores y moderadores se crean cada uno dos nicks diferentes (por supuesto, sin que nadie lo sepa). Uno lo utilizan de forma exclusiva para las labores de tutela y buen funcionamiento del foro, mientras el otro lo usan solamente cuando quieran intervenir como usuarios.
La puesta en marcha de esta regla tan básica genera, a mi modo de ver, dos efectos muy positivos.
-El usuario identifica al administrador como una persona que solo se dedica a ordenar el foro para su buena marcha, sin usar su teórico poder para meterse en otro tipo de argumentos. El usuario, por tanto, se siente más libre.
-El administrador y moderadores sufren un desgaste mucho menor y a la vez tienen mayor libertad para participar como usuarios, sin que nadie los relacione con los gestores del invento.
Escrita el 14 de marzo de 2.007.
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