sábado, 4 de febrero de 2012

Adiós a este blog, con una última y pesimista reflexión

Ya las tenía algo abandonadas, pero probablemente, esta vaya a ser, la última de mis reflexiones viajeras, que comenzaron a dar contenidos a este blog, allá por el año, 2.006: No las abandono por hartazgo, por despecho o porque ya no siga teniendo las ideas calaras. Es sencillamente, por un par de razones, más simples y duras, que las anteriormente expuestas.

Por un lado, me declaro en huelga de pensamiento y es por salud –emtal y física-: siendo tal, la indignación que tengo, con tan solo un mes de gobierno del PP, si sigo a este frenético ritmo, no voy a llegar al segundo año, de los ocho mínimos, que van a estar en el poder, sin que me de un infarto.

¿Por qué nos hemos vuelto a dejar engañar, por estos señores, que decían unas cosas y ahora hacen otras?. ¿Por qué, a la misma persona que no valía en 2.004 y 2.008, confidente de los que nos mintieron en 2.004, le hemos regalado una mayoría absoluta y carta blanca, durante los próximos cuatro años?. O, simplemente, ¿tenemos lo que nos merecemos y la cosa, no da más de sí?

El individuo que nos gobierna y sus acólitos, que se han pasado dos legislaturas crispando al país y denostando a Zapatero –como si no fuera un presidente legítimo, según las leyes vigentes--, no ha parado, hasta tener el “juguetito” en sus manos, al grito de, “es mío y hasta que no me lo deis, me enfado”, tenía, según decía, soluciones muy correctas e imaginativas, para arreglar los problemas de España

Tan creativas era, que han consistido en putear a los trabajadores –subiendo el IRPF-, a los ahorradores –pasando del 19%, al 21%, las retenciones- y a los que con su esfuerzo personal y ante la inoperancia de los gobiernos –el anterior incluido-, han logrado poseer una casa –subiéndoles, ferozmente, el maldito IBI-. Además, los cinco céntimos sanitarios de la gasolina, el copago de los medicamentos y bla bla bla, todas las medidas que vendrán, después de las elecciones andaluzas. Entre ellas, la subida del IVA. Para tomar estas decisiones, tan extremadamente imaginativas, bastaría con haber traído a Berlusconi o dejar a quien estaba.

Recortes y más recortes, de los que podría haber dado ejemplo, empezando por reducir su sueldo y haberse quedado a gobernar en su casa –como un día, nos mintió-, ahorrando muchos costes

Ideas creativas, al nuevo presidente del Gobierno, se las puedo dar yo, sin problema: haga como los de Gran Hermano y subaste –en este caso- plazas de funcionarios de la administración pública, en vez de entrar en la casa. ¡Se sorprenderá, de lo que es capaz la gente, por tener un trabajo!

La segunda de las razones, de que esta sea, mi última reflexión es, que si las cosas no cambian, tendré que abrir otro blog, distinto a este, llamado, “reflexiones de una emigrante”. Como sabéis, el día 7 de febrero, comenzamos nuestro viaje por África occidental. Será nuestro último periplo largo, de unos tres o cuatro meses de duración. Colgaremos las botas, porque ya no nos compensa este tipo de vida -por diversas razones, que no vienen al caso- y porque los ahorros menguan, a gran velocidad y debemos guardar un dinero, como colchón.

Habrá que volver a trabajar y las posibilidades de hacerlo en nuestro país, para personas de mediana edad, son imposibles. Como, ocurrió con otras generaciones, tendremos que emigrar a otros países –lo más probable, del tercer mundo- y montar un negocio o algo así. Al menos allí, si te va mal, pierdes solo los ahorros, mientras que aquí –si es que te dan el crédito-, te endeudas para toda tu vida, sino sabes tocar la tecla adefcuada.

No nos lamentamos. Porque ya no nos gusta vivir en un país, tan frívolo como este, donde genera más inquietudes un famosito, que llegar a fin de año, con seis millones de parados. Lo tomamos con toda naturalidad y resignación y no hacemos ni amagos, de mandar a toda la clase política, a freír espárragos.

Por quienes más lo sentimos, es por los jóvenes. Nosotros, ya hemos disfrutado mucho e intensamente de la vida, hemos trabajado en cosas maravillosas y habremos visitado a la vuelta de este próximo viaje, más de 115 países del mundo. Si nos tenemos que joder y ajustarnos el cinturón, lo haremos, aunque no nos guste. Si tenemos, que volver a comer en casa de nuestros padres, como hacéis muchos de vosotros, también lo haremos. Al fin y al cabo, son pensionistas y estos en este país, son intocables, porque suman nueve millones de votos.

Lo que nos fastidia es, que la generación más preparada de la historia de España, no tenga una sola oportunidad –ya no digo, de lo que ha estudiado, sino de nada de nada. Generación, que hasta ha conseguido, que en este país, se superara el eterno complejo y trauma, de no saber hablar inglés. ¡En fin chicos y chicas: los más audaces, nos encontraremos en la inmigración, tomaremos unas cervezas y nos haremos unas risas, mientras aquí, disfrutan del Tito Mariano y los suyos (entre ellos el que ha dicho, que vulnerar y prohibir derechos individuales, como el del aborto, es la ley más progresista, que ha gestionado en su vida). Espero, que de tanto repetirlas, las mentiras de este gobierno, no se acaben convirtiendo, en verdad.

De momento y hasta que llegue el momento de emigrar, he cancelado ver los informativos y he dejado de leer los periódicos. No quiero tener contacto con cosas, que me hagan pensar. Solo quiero, tener noticias de fútbol u otros deportes y ver series de ficción y películas, que me hagan reír.

Por último, no creáis que lo mío es ensañamiento, por ser una víctima de la crisis. Nuestros problemas, no derivan de esta, sino de una puta jueza, que cometió unas tremendas irregularidades. Pero, hablar del tema de la justicia, no daría para una reflexión, sino para un blog entero.

Gracias a todos, por haberme seguido