"Jamás respondisteis a mi reclamación y el exceso de peso en el equipaje es más caro, que el kilo de marisco en Navidad, pero aun así...: ¡os quiero!". No hace mucho que en la prensa, encontrábamos estos fragmentos de una carta, que una usuaria valenciana, enviaba a las oficinas de la compañía aérea Ryanair. Esto viene a demostrar, que las controversias que genera la bajo coste irlandesa, ya no solo están en el plano social, sino dentro del propio individuo. Pura relación de amor/odio.
En el fondo creo, que a Ryanair le va la marcha y que lejos de incomodarles, tanta crítica les reconforta. Es aquello tan viejo, del que hablen de mi, aunque sea mal. Y a otros muchos, también les viene bien. Por ejemplo, al gobierno. Porque mientras se habla, de que si Ryanair cobra no se cuanto por cada bulto o por el check-in on line, nadie hace comentarios sobre la millonada que se está gastando el estado –con comisiones incluidas, para muchos políticos, supongo-, en hacer un AVE para ricos y potentados.
Mientras tanto, Ryanair gana dinero, como debe hacer cualquier empresa, da oportunidad de viajar a mucha gente y se ríe del mundo, ahora con lo de volar de pie y pagar un euro por el servicio. Pues si hay que abonarlo, pues se abona y debate terminado. ¿Por qué nos quejamos por esto y nos quedamos tan campantes, cuando nos soplan diez euros, por un recorrido de 20 kilómetros, que no vale ni dos, desde un aeropuerto, hasta el centro de la ciudad?.
Y es que desde mi punto de vista, las controversias se acaban rápido, bajo el contundente argumento, de que puedo volar de Madrid a Barcelona por 4 euros, con todo incluido y con solo equipaje de mano, mientras que ir en el tren, me cuesta quince veces más. Otro ejemplo: Para el puente de octubre, haremos Valladolid-Milán-Madrid, por tan solo 8 euros por persona. ¿Imagináis cuanto cuesta, solo el tramo Barcelona-Milán, a través de esa sociedad de desvergonzados, que en su día crearon RENFE y la francesa SNCF? Con esto, ya no haría falta seguir, pero me apetece hacerlo.
Las asociaciones de consumidores –líbrenos Dios de ellas- hablan y no paran, de que la política de Ryanair es engañosa y poco clara, de que cobran por todo, de que no dan servicios…, pero nunca las oí protestar, cuando dos gilipollas, con pretensiones de exclusividad mundial, pagan casi 4.000 euros cada uno, por un viaje de 15 días a Argentina, en Viajes de El Corte Inglés. Y hay mucha gente, que despilfarra esta cantidad y sale gozosa, sin saber que gasta diez veces más de lo que cuesta y que luego ponen el grito en el cielo, porque Ryanair les quiera cobrar, 16 euros por una maleta. ¡La estupidez humana, no tiene, ni tendrá límites!.
Ryanair no engaña a nadie y si son muchos, los que tratan de engañar a Ryanair. Por ejemplo, intentando pasar por bultos de mano, auténticos maletones o como vi el otro día a una chica, proponiendo colar como este tipo de equipaje, un bulto que pesaba 14,5 kilos.
Vamos a tratar de analizar, los tres principales tópicos.
1.- “Ryanair cobra por todo, sobre todo por el equipaje.”. Sí, es cierto y parece justo, que uno que lleva 15 kilos, pague más que el que viaja con un simple bolsito de mano. Lo que resulta completamente injusto, es lo contrario: Pagar por lo que no se usa. En las compañías tradicionales, nos obligan a desembolsar dinero, por todos los servicios que ofrecen, independientemente de que los utilicemos o no.
2.- “El sistema de venta es confuso y engañoso”. Falso. Es sencillísimo, para toda aquella persona, con una formación media, que se haya dado tres garbeos por internet. Se trata simplemente, de ir añadiendo o restando servicios y pagar exclusivamente, por lo que se necesita. Es bastante más fácil, que sea una agencia, la que te meta la bacalá
3.- “Cuando hay problemas, como cancelaciones u otros, se lavan las manos”. Sí, eso está mal, ciertamente, pero muchas de las aerolíneas tradicionales, hacen exactamente lo mismo. Aún estoy esperando, la indemnización de Alitalia, después de haber presentado la reclamación cinco veces, por el retraso de 24 horas, que tuvimos el año pasado, volviendo de Turquía. Cierto es que a nosotros, por lo menos nos dieron comida y hotel, pero a la mayoría, ni eso. Y me temo, que o voy a los tribunales o no cobraré nunca. Legislación Europea = Papel mojado.
Voy ahora, con lo que me parecen las mayores ventajas, de esta aerolínea irlandesa:
-Gracias a Ryanair, los ciudadanos de provincias, ya no necesitamos desplazarnos a Madrid, para viajar por Europa. Y gracias a esta compañía, el turismo en nuestras propias ciudades, se ha revitalizado.
-Es una de las compañías aéreas, con mayor puntualidad. Y no es casualidad, porque su rentabilidad, depende de ello.
-O es que me estoy acostumbrando o últimamente, la distancia entre asientos ha aumentado algo y estos son un poco menos espartanos, que antes.
-Te avisan mil veces por correo electrónico, los días antes de tu vuelo, para que hagas la facturación on line, por lo que es casi imposible, que se te pueda olvidar.
Pero como digo unas cosas, también menciono las otras. Hay tres cosas de esta compañía, que no entiendo y que serían fácilmente mejorables.
-El excesivo celo, comparado con la mayoría de la competencia, en llevar hasta el límite, todos los protocolos de seguridad.
-El trato poco amable del personal. No he visto aerolínea, con más caras de amargad@s de la vida, entre l@s auxiliares de vuelo, que en esta.
-Carece de3 sentido, que pagar con la tarjeta de la compañía, salga 10 euros más caro, que hacerlo con una Visa Classic Aunque esto es pura anécdota.